Principio de derecho de defensa

El principio de defensa pretende garantizar la respuesta de un indebido ante una posible condena. Garantiza que la persona tenga su derecho de defensa y cuente con los medios para ello. En España, el artículo 24 de la Constitución Española regula el llamado derecho a la tutela judicial efectiva asegurando que todas las personas tienen derecho a obtener la tutela efectiva de los jueces y tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos, sin que, en ningún caso, pueda producirse indefensión.

Asimismo, añade el citado precepto, todos tienen derecho al Juez ordinario predeterminado por la Ley, a la defensa y a la asistencia de letrado, a ser informados de la acusación formulada contra ellos, a un proceso público sin dilaciones indebidas y con todas las garantías, a utilizar los medios de prueba pertinentes para su defensa, a no declarar contra sí mismos, a no confesarse culpables y a la presunción de inocencia.